La cocina me saluda.
Los olores tomaron participación.
Los sonidos colores y se plantaron risas.
Los olores tomaron participación.
Los sonidos colores y se plantaron risas.
Los colores de Octavia son casi indescriptibles pero
lo más extraño son sus maullidos a media madrugada.
Nuestro himno es el mate que acompaña las conversaciones.
Mi
impuntualidad es la razón más grande para llegar a la hora.
La banda sonora de todo es la gotera de la ducha, la rutina
tomo una especie de sonido trasparente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario